Políticas ESG de responsabilidad social corporativa: retos para los departamentos jurídicos y habilidades necesarias para su implementación
La conciencia sobre la responsabilidad social corporativa se ha convertido en un aspecto estratégico para las empresas, evidenciando un cambio de paradigma importante con relación a la percepción de que la valoración de una organización trasciende una evaluación objetiva limitada a su capacidad de generar lucro.
Los pilares edificantes de las políticas ESG “environmental, social and governance” representan un abordaje estructurado de autoconocimiento con relación a prácticas empresariales y reflejan cómo las organizaciones se sitúan en el ecosistema corporativo. Además, es importante que se lleve a cabo una investigación de contexto para la evaluación de responsabilidades regulatorias, la definición de objetivos y compromisos según los intereses institucionales, la formalización de políticas internas que generan responsabilidades para los empleados y prestadores de servicios, además de la implementación de procedimientos que derivan en numerosas tareas de adecuación, control, investigación y responsabilización de inconformidades.
Según sus conceptos, las políticas de ESG se dedican al abordaje de tres temas fundamentales para la responsabilidad social corporativa:
· Ambiental (environment): este pilar representa la responsabilidad de una organización frente su impacto ambiental y la gestión de los recursos naturales necesarios para el desarrollo de la actividad empresarial. Este aspecto busca considerar la huella ambiental de las organizaciones y minimizar su impacto por medio de ciertos compromisos como la reducción de emisión de carbono, gestión de residuos y conservación de biodiversidad.
· Social (social): este componente se refiere a la forma con la cual una empresa se relaciona e interactúa con empleados, clientes, proveedores y también su impacto en su comunidad, representando un compromiso de carácter ético y social. Este pilar fomenta cuestiones como la defensa de los derechos humanos, condiciones laborales justas, diversidad e inclusión y contribuciones a la colectividad.
· Gobernanza (governance): este pilar representa la forma en la que una organización se estructura, delimita su perfil de operación y el funcionamiento de sus actividades de forma ética y transparente. Además, el aspecto de gobernanza se dedica a la identificación de necesidades regulatorias, como el cumplimiento de normativas de anticorrupción y blanqueo de capitales, protección de datos personales y gestión de riesgos empresariales.
La integración efectiva de políticas ESG en las empresas puede tener una serie de impactos positivos, como la mejora de la reputación empresarial y la atracción de inversores, clientes y retención de talento, reducción de riesgos legales y financieros; y, una vez aplicadas medidas de gobernanza para cumplir con las leyes y prevenir conflictos internos y externos, la mejora de la eficiencia en razón de la optimización de recursos materiales y humanos y la minimización de costos operativos.
Sin embargo, las prácticas de ESG suponen una gran cantidad de tareas de distintas naturaleza para que sus políticas sean monitoreadas y sus objetivos alcanzados. En una reciente evaluación de las principales actividades jurídicas en departamentos legales en empresas, “The General Counsel Report 2023”, por la FTI Consulting, se ha verificado que para las asesorías jurídicas que identifican un aumento de riesgo gestionado por su departamento, el 100% ha citado las actividades de ESG como una causa de aumento de su demanda, mientras que el 60% de los respondientes han confirmado que las ESG son una necesidad de negocio para sus organizaciones.
Según el estudio, “para directores de departamentos jurídicos, las políticas ESG representan nuevas oportunidades, responsabilidades y riesgos”. Las actividades de los equipos legales para los controles e investigaciones sobre este tema se dividen entre la dedicación a los asuntos ambientales (21%), gobernanza (17%), sociales (14%) y la asesoría general sobre implicaciones regulatorias (48%).
Considerando el abordaje holístico para el apoyo jurídico a estas necesidades y la aplicación de distintas capacidades técnicas y relacionales por parte de los profesionales responsables, destacamos algunas características para que los departamentos jurídicos puedan actuar de forma a contribuir con la responsabilidad social corporativa:
· Habilidad de investigación y conocimiento sobre ESG: el profesional debe ser capaz de investigar el contexto regulatorio en constante evolución y mantenerse actualizado sobre tendencias y mejores prácticas para instruir a la empresa sobre el cumplimiento normativo.
· Abordaje de prevención de riesgos y ética: considerando el propósito de las ESG de afirmar la responsabilidad social de una empresa, es importante que el profesional sea capacitado para el pensamiento ético en situaciones complejas, identificando y evaluando los posibles riesgos derivados de las actividades empresariales y desarrollando estrategias de prevención y mitigación.
· Planificación estratégica: capacidad de planificar a largo plazo las metas estratégicas para la compañía, que serán determinantes para la dirección de los planes de acción, medidas de control y evaluación de su eficiencia.
· Trabajo en equipo y relación con distintos departamentos: ESG representa una actividad transversal en las empresas y requiere habilidades sociales y de empatía con distintos departamentos para que colaboren para el alcance de los objetivos predefinidos. Una interacción fluida con enfoque en comprender las necesidades y preocupaciones de grupos diversos fomenta la cooperación y la eficacia de las acciones desarrolladas.
· Habilidades de comunicación: es importante que la comunicación de los departamentos jurídicos sea efectiva, con la transmisión clara de los compromisos y responsabilidades ESG para los empleados y proveedores.
· Liderazgo transformacional: para que lidere iniciativas de cambios culturales y organizativos dentro de una compañía, el departamento responsable debe ser capacitado con habilidades de liderazgo para la contribución de todas aquellas personas necesarias al logro de los propósitos.
· Solución de problemas y conflictos: la habilidad para identificar los intereses de distintos agentes, analizar datos y evidencias para comprender los puntos de divergencia en una disputa y tomar decisiones basadas en datos de forma analítica es una característica fundamental para los profesionales de ESG.
Finalmente, según el estudio “Future Ready Lawyer” de Wolters Kluwer, “ESG ha emergido rápidamente como una demanda específica y significante en los departamentos jurídicos, y continuará creciendo”. Según la encuesta publicada en 2022, el 56% de los departamentos jurídicos afirman que las demandas internas por asesoría jurídica en ESG había crecido en su departamento en el año de 2021, y un 64% espera que la demanda siga creciendo en los próximos años.
Guilherme Hernandes Sicuto, Senior Privacy Counsel, Legal Army